29/12/2022
[ EN LA MESA NO SE HABLA DE POLITICA, NI DE RELIGIÓN… MUCHO MENOS DE EDUCACIÓN ]
Según las estadísticas entregadas por las autoridades sanitarias de nuestro país (el Ministerio de Salud o MINSAL) recaudadas y publicadas en el “Diagnóstico de infecciones de transmisión sexual entre 2017 y 2021”, la sífilis es la enfermedad más diagnosticada en nuestro país, doblando las notificaciones de diagnósticos de VIH, convirtiéndose así en ITS predominante en el territorio nacional.
De un total de 70.660 casos notificados por ITS, esta infección ocupa el 50 % de la estadística, es decir, más de 35 mil chilenas y chilenos han sido diagnosticados con esta patología, seguida por el VIH con un 30 %, la Gonorrea con un 15 %, mientras que la hepatitis B y C llegan a menos del 10 % de los diagnósticos. El ranking de mayor riesgo de infecciones de transmisión sexual lo lideran las regiones de Antofagasta, Atacama y Metropolitana. Mientras que los territorios con menos índice son Magallanes, Arica y Parinacota, y Ñuble.
En respuesta a esta realidad, el Ministerio de Salud (MINSAL) representados por la ministra Ximena Aguilar, y el subsecretario de Salud Pública, Cristóbal Cuadrado, junto a la Asociación Chilena de Municipalidades (AChM), representado por su presidenta, Carolina Leitao (actual alcaldesa de Peñalolén), firmaron un convenio que permitirá a los municipios disponer de dispensadores de pr*********os internos y externos, los cuales serán ubicados por los municipios en lugares que las autoridades locales estimen más convenientes.
Ahora bien, pese a la buena recepción de las medias acatas por las autoridades, no esta demás recordar que este trabajo siempre debe ir acompañado de la concientización y la educación, asiendo aquí donde se cae y continúa generando un gran déficit en materia de educación en nuestro país. Lo anteriormente mencionado, hace recordar al polémico proyecto de Educación Sexual Integral (ESI) ingresado e impulsado por la diputada Camila Rojas (Comunes) a partir del 12 de septiembre del 2019, el cual fue rechazado por la Cámara de Diputados un 15 de octubre de 2020, al no alcanzar el quorum requerido en las normas de Ley Orgánica Constitucional (LOC), la cual había sido aprobada en general con 71 votos a favor, 65 en contra y dos abstenciones.
Dicho proyecto pretendía, en primera instancias, actualizar la normativa actual (ley N° 20.418) publicada el 28 de enero del 2010 que regula, en su primer artículo, la obligación de incluir programas de educación sexual en los establecimientos desde una mirada sanitaria, y establecer las bases generales para la educación afectiva y sexual de niños, niñas y adolescentes en los establecimientos educaciones, abordando problemáticas como el abuso sexual infantil y el aumento de los índices de enfermedades de transmisión sexual y su concentración en la población adolescente.
En nuestra región, la Diputada Francesca Muñoz Gonzales (ex RN), actualmente afiliada a Acción Republicana (un movimiento socio-político que se encuentra asociada, entre otras figuras, al excandidato presidencial José Antonio Kast), quién representa al distrito 20 (Región del Bío Bío), utiliza su cercana relación con las iglesias evangélicas para amplificar discursos de odio y retroceso, votó en contra del proyecto calificándolo de “malo e innecesario”, esto a raíz de uno de los factores que albergaría el proyecto (el enfoque de género), contribuyendo, desde una supuesta visión evangelizadora, a la desinformación en materia de educación sexual de nuestro país.
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