Las principales actividades astronómicas a nivel nacional son privadas, reservadas o de muy puntual integración al común de las personas, obligando a estas a dirigirse a los lugares de observacion, los cuales muchas veces se encuentran a largas distancias, o definitivamente en cuanto a tecnología y soporte, están descontextualizados. Hoy la astronomía se presenta como una forma potente, atractiva
y que genera toda una experiencia, que no solo se relaciona ala educación o la ciencia, si no también respecto a esta propuesta, como un factible medio de entretenimiento. En rigor, el no contar con centros de observación astronómica disponibles y abiertos a la comunidad, no se puede plantear como un problema, sin embargo se generó una gran oportunidad para desarrollar esta temática, que es absolutamente desconocida por la mayoría de la comunidad, y que hoy no es explotada en la región principalmente como motor de educación y turismo. A nivel nacional (principalmente hacia el norte), existen centros de observación turísticos y educativos, pero que no tienen el plus de ser móviles e itinerantes, que ofrezcan este contacto real entre el universo y el común de la población.
