05/08/2023
𝐂ó𝐦𝐨 𝐝𝐞𝐜𝐢𝐚 𝐝𝐨𝐧 𝐑𝐚ú𝐥 𝐕𝐞𝐥𝐚𝐬𝐜𝐨 "𝐀ú𝐧 𝐡𝐚𝐲 𝐦á𝐬"...
Existe la versión de que Zihuatanejo fue un santuario dedicado a la diosa Cihuatéotl (Cihuacóatl), representada por la mujer–diosa olmeca, madre del género humano y representante del alma de las mujeres muertas de parto o madre de los guerreros mu***os en combate, que escoltaba al sol desde el cenit del universo náhuatl, hasta su desaparición diaria por las tardes en el mar; y cuya imagen bien pudo ser trasladada desde la costa del Golfo. (Y cuyo adoratorio pudiera estar ligado con el área denominada La Madera, ubicada al oriente de la playa del puerto, donde se supone existió un santuario, por el número significativo de fragmentos de figurillas de barro que aún existen).
Alrededor del Siglo XV la zona era habitada por los grupos llamados cumbia y panteca, quienes se dedicaban a explotar las minas de sal en Ixtapa y estaban emparentados con los nahuas coixcas que habían hecho su arribo al territorio en el Siglo XI, en los actuales límites de Michoacán y Guerrero.
A fines del Siglo XV, los mexicas conquistaron a los pueblos de la Costa Grande e integraron la provincia tributaria de Cihuatlán, donde quedó comprendido este territorio municipal. Los poblados más habitados eran Ixtapa, Pantal, Pochutla y Mitla.
A la llegada de los españoles, Zihuatanejo fue punto de partida de expediciones marítimas a fin de explorar la costa primero, y luego para travesías más largas, como la de Alvarado de Saavedra que llegó hasta Nueva Guinea.
Ixtapa fue entregada a un hijo del conquistador Antón Sánchez; Pochutla y Tamaloca formaban parte de la encomienda. Al conformarse la división política de la Nueva España, Zihuatanejo quedó integrado a la alcaldía mayor de Zacatula; sólo era un pueblo costero dedicado a la pesca, aunque en sus alrededores existían varias haciendas de cierta importancia que mejoraron el cultivo de cacao, algodón, vainilla y maíz. En la bahía atracaban, ocasionalmente, barcos procedentes de Europa para cargar las maderas de cedro, roble, nogal, granadillo, y minerales que se explotaban. Por ello no escapó a las acciones de piratas como sir Francis Drake, Dapier y Anzón.
En la segunda mitad del Siglo XVI los astilleros de Zacatula se incendiaron y fueron sustituidos en Zihuatanejo. En 1876, al ser reorganizada la división política de la Nueva España, Zihuatanejo quedó de nuevo integrado a la subdelegación de Zacatula, dependiente de la intendencia de México.
Durante la Guerra de Independencia, Morelos utilizó a Zihuatanejo como puerto logístico, y en 1811, al crear la provincia de Tecpan, el actual territorio municipal quedó incluido en ella.
También fue considerado en la Capitanía General del Sur, creada por Iturbide en 1821, y a cuyo mando estuvo Vicente Guerrero. En 1824, al instaurarse la primera República federal, pasó a pertenecer al partido de Tecpan, del distrito de Acapulco, a su vez del estado de México.
Al crearse el estado de Guerrero, Zihuatanejo formó parte del municipio de La Unión y Petatlán, así como del distrito de Galeana.
Debido a los acontecimientos de la Revolución Mexicana, se alteró la vida local y hubo la presencia de varios bandos y doctrinas, incluyendo a las fuerzas federales. En 1911 la Revolución se extiende por todo el estado, y en la zona, los hermanos López (Alfredo, Leonel, Héctor y Homero) inician la lucha.
El 30 de enero de 1918, como repercusión inmediata de la reclusión del gobernador Julio Ádams Adame, se dio un brote de movimiento armado contra el Gobierno federal. El 23 de enero de 1924 los agraristas toman la ciudad. El 11 de mayo de 1926 los vidalistas atacan Zihuatanejo y en un convenio con Joaquín Amaro, el Gobierno deja libres a los revolucionarios.
Pasada esa época, queda el problema de la propiedad agrícola. Pantla, Ixtapa, Agua de Correa, Coacoyul y otras tierras se convirtieron en ejidos.
El 24 de abril de 1952, a las 5:00 de la mañana, estalla la huelga de los copreros. Desde Acapulco hasta Zihuatanejo, la carretera fue bloqueada por éstos, en busca de una solución a sus demandas.
El 23 de diciembre de 1953, mediante Decreto 50, se constituyó como municipio, perteneciendo al distrito de Montes de Oca. Fue creado con la porción oriental del municipio de La Unión y un sector de Petatlán. El 26 de enero de 1977, mediante Decreto de la Ley Orgánica del Poder Judicial del Estado de Guerrero 87, Zihuatanejo es municipalidad del nuevo distrito de Azueta; deja de pertenecer al distrito de Montes de Oca. Actualmente es cabecera del distrito de Azueta.
A partir del 6 de mayo de 2008 entró en vigor el uso del nuevo nombre del municipio de Zihuatanejo de Azueta (Decreto 450 del Congreso del estado de Guerrero de fecha 6 de mayo de 2008).
Para 1970 Zihuatanejo tenía ya 17 873 habitantes. Su población se había duplicado de los 9693 que tenía en 1960. El crecimiento de la población de la ciudad se debió a que constituyó un polo de atracción por las ofertas de trabajo en las obras de infraestructura. La población del municipio en su mayoría se dedicaba a las actividades agropecuarias, pero la ciudad de Zihuatanejo absorbió la mano de obra desocupada en los periodos de “descanso agrícola”, pues se ha constituido como un centro turístico de primer nivel a escala nacional.
En 1976 el Gobierno federal estableció un fideicomiso para la creación del polo turístico Ixtapa Zihuatanejo. Esto favoreció aún más al municipio dándole una nueva imagen urbana y mayor importancia turística.