01/05/2023
Leyenda de la Flor de Mayo🌸
Hubo una vez un hombre maya que a diario contemplaba enamorado a las estrellas, sobre todo las de la constelación de la Cruz del Sur. Estaba casado con una linda mujer, pero no podían tener hijos y eso lo deprimía bastante. Por eso, pedía fervientemente a los dioses que le concedieran la dicha de tener una hija tan bella como las estrellas que reverenciaba. Y los dioses, al escuchar tan intensos ruegos, decidieron cumplirle el deseo.
Sucedió que su mujer quedó embarazada y en el mes de mayo dio a luz a una niña muy bella, pero su piel no era oscura como la de los mayas, sino más bien pálida como luz de luna. Y eso era así porque los dioses habían dispuesto que naciera una estrella de la esposa de aquel hombre.
Pero la niña era delicada como una flor y su piel era blanca color de cera. Por eso la llamaron Sac Nicté, que en maya significa flor blanca. Y todas las noches la pequeña miraba con devoción a la Cruz del Sur, recordando con tristeza cuando era una estrella.
Al crecer, la salud de Sac Nicté se fue deteriorando. Cada día era más débil y su piel se volvía más blanca. Sus angustiados padres pidieron la intervención de los mejores chamanes, quienes la examinaron y le dieron toda clase de pócimas. Pero todos sus esfuerzos y conjuros fueron ineficaces frente a esa rara enfermedad. Hasta insinuaron que era voluntad de los dioses que Sac Nicté regresara al cielo, de donde había venido para complacer el deseo del padre.
No pasaría mucho tiempo después de aquel presagio. Era el mes de mayo cuando la niña Sac Nicté murió, en el mismo mes en que los campos se visten de flores y se enciende en el cielo nocturno la Cruz del Sur.
El indígena estaba desconsolado, pero una noche soñó que su hijita le decía:
−Padre, no llores más, pues ahora estoy bien. He regresado al cielo, al lado de mis hermanas, las estrellas, pero cada mayo mi alma volverá a la tierra convertida en flor.
Y el sueño del indígena se cumplió, pues al año siguiente, cuando reapareció la Cruz del Sur, sobre la tumba de su hija brotó un árbol que cada mayo da flores blancas y bellas como las estrellas, por lo que se conoce con el nombre de la Flor de Mayo.