20/08/2021
Biblioteca Iberoamericana Octavio Paz
La Biblioteca Iberoamericana Octavio Paz cumple 29 años de ser un refugio para el conocimiento y un espacio que ofrece actividades y opciones culturales para personas de todas las edades; es uno de los más importantes en el Área Metropolitana de Guadalajara (AMG) y el Estado.
De la mano de su primer Director, el fallecido escritor Fernando del Paso, Premio Cervantes 2015, la biblioteca cumplió su vocación de ser un lugar especializado en literatura iberoamericana, pero fue más allá, pues se convirtió en un espacio incluyente para niñas, niños y adolescentes, y para personas invidentes, destacó su Directora, poeta Carmen Villoro.
En su fundación, la biblioteca tenía 15 mil volúmenes y en 2020 suma más de 70 mil ejemplares de libros dedicados a la literatura y las humanidades de Iberoamérica, que son utilizados por investigadores y académicos en estas disciplinas; y los libros dedicados a la llamada “cultura general”, que atraen a todo tipo de lectores.
Villoro, quien en 2019 tomó las riendas de la biblioteca tras la muerte de Del Paso, afirmó que, junto con la riqueza bibliográfica, se ha buscado preservar el edificio histórico, una joya arquitectónica y artística con más de 400 años de antigüedad, que antes fue el Templo de Santo Tomás.
“Se ha cuidado mucho que el edificio se conserve, así como sus murales, que son una joya artística; murales de Amado de la Cueva y de David Alfaro Siqueiros. Todos los administradores han cuidado que se conserve el edificio en las mejores condiciones”, dijo.
Una biblioteca para todos
Talleres, funciones de cuentacuentos, círculos de lectura, presentaciones de libros, obras de teatro y sesiones de lectura en voz alta; la amplia gama de actividades que ofrece la biblioteca la ha consolidado como un espacio incluyente al que puede acercarse toda persona.
Uno de los objetivos de Villoro es convertir a la biblioteca en un centro cultural en el que todos tengan cabida. “Hemos tenido buenas conferencias, la visita de escritores importantes. Este último año fue sede de la Feria Internacional del Libro con lecturas públicas. Tenemos un acervo muy bueno, ahora hay que darlo a conocer y convertir a la biblioteca en un centro cultural; esa es mi intención y poco a poco lo vamos a ir logrando”, recalcó Villoro.
Destacó el área infantil y juvenil, que fue abierta al público en 2002 y el servicio para personas invidentes y débiles visuales, puesta a disposición de esta población en 2005 con computadoras especiales y libros en sistema Braille.