13/02/2021
EL LENGUAJE CORPORAL DEL CABALLO
Debemos tener claro que cada caballo se expresa de forma ligeramente distinta y que todos los signos o señales de comunicación de los que hablaremos a continuación debemos interpretarlos en conjunto y no de forma aislada pues podrían llevarnos a error. Pero lo cierto es que si nos fijamos en el lenguaje corporal de nuestro caballo podremos entender muchas cosas de lo que le está pasando a nuestro animal.
Hay que destacar que la capacidad de comunicarse de los caballos es muy alta. Este conjunto de señales, sonidos o pequeños movimientos que el caballo es capaz de transmitir sirve para comunicarse tanto entre ellos como con nosotros.
Simplemente debemos saber qué significa cada uno de sus gestos y sonidos y podremos llegar a entender sin complicaciones lo que desea transmitirnos en cada momento. Por eso es importante abordar algunas claves para entenderlos mejor a través del lenguaje corporal.
LAS OREJAS COMO MEDIO DE COMUNICACIÓN
Uno de los medios más utilizados por el caballo para intentar comunicarse con nosotros son, sin duda, sus orejas. Al igual que muchas personas gesticulan para tratar de expresarse mejor ante los demás, los caballos mueven sus orejas para intentar reafirmar una reacción o una intención.
La forma más obvia que nos puede indicar el estado de estos animales o de lo que quieren trasmitir es la posición de sus orejas. Partimos de su posición normal, estas normalmente están relajadas y se mueven continuamente. Pero cuando algo interfiere en su estado de relajación se posicionan de una u otra forma.
OREJAS HACIA DELANTE
En principio es la situación normal de relajación, si el caballo se encuentra con las orejas en esta posición generalmente el caballo se encuentra confiado y tranquilo pero si se adelantan en exceso es que algo le esta llamando la atención, debemos de estar alerta por que puede ser una alarma que nos indica una situación de miedo y deberemos de actuar relajándolo.
Las orejas hacia delante dan muestra también de atención: así deben estar durante una sesión de trabajo o cuando el caballo de salto se aproxima a un obstáculo. Las orejas hacia delante y la mirada atenta expresan confianza y concentración.
OREJAS HACIA ATRÁS
Las orejas del caballo tienen la particularidad de poder rotar sobre su eje. Esto les permite localizar el lugar de donde viene un sonido, pero también puede ser una forma de comunicación. En este sentido conviene saber que:
– Si el caballo dirige una oreja hacia atrás, hacia un lugar donde su vista no alcanza, estará indicando desconfianza respecto a lo que ocurre en ese sitio.
– Si echa ambas orejas hacia atrás (aunque no se haya producido ningún ruido), significará que está inquieto, que no se fía.
– Si además de moverlas hacia atrás, las aplana, ¡póngase alerta!, es un claro signo de una reacción de agresión inminente (puede que el caballo intente intimidar a otro animal o a una persona que se acerca).
Muchos caballos jóvenes echan sus orejas hacia atrás cuando son m***ados, esto significa que realmente no reconoce a la persona (en ese momento y para el caballo, un intruso) que se ha situado tras él.
CADA OREJA HACIA UN LADO
Con seguridad en más de una ocasión habrá visto como el caballo echa una oreja hacia delante y la otra hacia atrás o hacia un lado.
Esto puede tener varios motivos, pero por lo general se trata de un signo de interrogación…
Lo más normal es que reaccione de esta forma al escuchar sonidos procedentes de varios lugares y esté intentando localizar su origen. Esto sucede cuando los sonidos están mal localizados, como por ejemplo en un lugar cerrado o allí donde el eco hace rebotar el sonido en todas direcciones. Las orejas actúan a modo de radar tratando de localizar la dirección de la que proviene el sonido.
Si mueve sus orejas de esta forma cuando usted lo m***a, querrá decirle que no tiene ni idea de lo que espera de él (puede que, sin darse cuenta, le haya transmitido dos órdenes contradictorias). De ahí la importancia de fijar un código vocal entre el jinete y el caballo que le deje claro al animal en cada momento lo que le pide, de forma que usted tan sólo tenga que mirar sus orejas para saber si le ha entendido…
OREJAS ESTIRADAS
Una figura muy común es ver al caballo con las orejas bien estiradas hacia arriba. En estos casos, las orejas están acompañadas por una elevación clara de la cabeza, que dará muestras de un gran asombro por parte del animal. Es como si se encontrara en un estado “previo”: ha captado un peligro, pero todavía no ha tomado una decisión sobre cómo actuar ante él.
El caballo está en alerta por algo que le ha llamado la atención, se asegurará de que no hay peligro y si es así las volverá a su estado normal de relajación.
OREJAS PEGADAS A LA NUCA
Las orejas aplanadas hacía atrás son un claro signo de que algo no anda bien, son una muestra de agresión inminente.
De hecho, cuando dos sementales se pelean es así como colocan sus orejas. El motivo es sencillo: tratan de evitar ser mordidos en esa zona por el adversario.
Esta posición de las orejas marca una situación previa a un ataque, antes de atacar por medio de mordiscos, patadas o con propio cuerpo, el caballo nos avisa plegando las orejas sobre la nuca.
Si durante el trabajo observa que el caballo aplana sus orejas, le estará mostrando su grado de receptividad, o lo que es lo mismo, le estará diciendo que no desea trabajar más, lo que puede deberse a varios motivos: un animal perezoso, con dolor en la espalda que le impide moverse, cansado físicamente, o simplemente ha perdido el interés por lo que está haciendo…
POSICIÓN DEL CUELLO Y LA CABEZA
Además de la posición de las orejas, otros buenos indicadores del estado de ánimo general del caballo son su cuello y cabeza.
Una cabeza alta por ejemplo puede significar lo siguiente:
* El caballo ha percibido algo a lo lejos que le genera curiosidad. Su adrenalina fluirá automáticamente en su sistema mientras se prepara para huir si percibe peligro.
* El caballo se encuentra preocupado, asustado o inseguro.
La cabeza inclinada: Si la cabeza del caballo se inclina y se combina con las orejas gachas esto puede significar que el caballo está pensando. Si la cabeza está extendida y las orejas están muy relajadas con la nariz hacia fuera, podría estar pidiendo algo.
Cuello arqueado: El caballo podría estar ligeramente alarmado o vacilante.
Mentón escondido / cabeza gacha: Esto puede significar que el caballo está enojado o en un estado agresivo. También puede estar solicitando permiso para entrar en el espacio de otra persona o caballo. Estas señales son facilmente confundibles.
¿QUÉ NOS DICEN LOS OJOS?
Ojos y nariz pueden indicarnos muchas cosas sobre lo que el caballo está sintiendo en cada momento:
Ojos cerrados y ollares relajados: el caballo se encuentra descansado. Unos ojos entrecerrados o somnolientos junto con unas orejas caídas nos indican que el caballo está dormitando, tranquilo y relajado. No debemos acercarnos a él sin antes hacerle notar nuestra presencia para evitar que se asuste.
Ojos muy abiertos y ollares alargados verticalmente: muestran nerviosismo o amenaza. Si los ollares se encuentran dilatados el caballo probablemente se encuentre muy nervioso, suele venir acompañado de resoplidos con mucha fuerza y ciertos ruidos muy característicos.
En un estado normal, los ojos del caballo permanecerán entrecerrados.
¿QUÉ NOS DICEN SUS PATAS?
Generalmente son una señal de advertencia o protesta.
Si advertimos que levanta la pata, deberemos entenderlo como una amenaza (si bien en numerosas ocasiones se quedará sólo en eso, en amenaza).
Otro movimiento típico que podemos observar en el caballo es el de manotear, o dar con las manos contra el suelo; lo cual deberemos entender como una protesta ante algo que se ve obligado a hacer sin desearlo (permanecer atado, ensillarlo…).
Seguramente habrá visto alguna vez cómo los caballos escarban la tierra con una de sus patas delanteras. Esa es una forma suave de protesta, hay algo que está buscando y aún no lo consigue. Por ejemplo, comida, que lo dejen tranquilo o también que le presten atención.
Algunos caballos también lo hacen cuando les colocan la montura. Están expresando que no es lo que más les gusta. Cuando realmente están furiosos golpean el suelo con sus patas delanteras.
LA POSICIÓN DE LA COLA
La cola es una parte del cuerpo muy expresiva también. A nivel practico, la utilidad de la cola para el caballo reside en la necesidad de espantar a los insectos que se posan en su lomo. Pero además como elemento de comunicación la cola nos aporta mucha información sobre el estado de ánimo de nuestro caballo.
Al contrario de lo que muchos cuidadores creen, el balanceo de la cola de un lado a otro no significa, como en el caso de los perros, alegría; sino que con él trata de decirnos que se siente extenuado y que no es capaz de dar más de sí (lo realiza, por ejemplo, cuando intentamos hacerle correr más rápido de lo que puede).
Una cola levantada es signo de emoción o excitación. ¿Sabía que cuando el caballo agacha su cola entre las piernas al igual que los perros se debe a que están asustados? Un caballo que se escabulle lejos con la cola metida hacia abajo está verdaderamente asustado. Por otra parte si el caballo está dando azotes con la cola es un signo de irritación, molestia y si la tiene enroscada es un signo de temor sumiso y generalmente precede una sacudida.