19/01/2021
A LA OPINIÓN PÚBLICA:
Queremos expresar nuevamente nuestro absoluto rechazo a la manipulación de la verdad de los hechos respecto AL ACCESO a la playa ubicada en la ribera poniente del Lago Colico, en la comuna de Cunco, Región de La Araucanía, QUE SÍ EXISTE, PORQUE LAS PLAYAS SON PÚBLICAS Y PERTENECEN A TODOS LOS CHILENOS, SIN DISTINCIONES NI EXCEPCIONES DE NINGÚN TIPO, y también al sesgo de la serie de videos que, sacados fuera de contexto, han circulado profusamente, para exponer, sólo desde un punto de vista, los graves incidentes ocurridos ayer en nuestra casa y en el sector.
Lamentablemente, los hechos descritos no corresponden en absoluto a la realidad que se vive en el sector de Villa La Esperanza del Lago Colico, donde UNA VEZ MÁS, un grupo de 35 personas, principalmente mujeres y niños, alentada por una organización liderada por los vecinos Gustavo Arellano y los primos Landeros, ingresaron a nuestra casa, descerrajando portones y rompiendo cercos, agrediendo y amenazándonos de muerte y de incendiar la propiedad. Lo mismo ocurrió con nuestros vecinos, que soportaron durante horas insultos, apedreos y destrucción de sus bienes.
Todo esto motivado por un supuesto acceso a la playa que nunca ha existido, como lo han determinado y confirmado todas las instancias judiciales y administrativas, ya que este ingreso SI EXISTE, A 150 METROS DE DISTANCIA del punto que han insistido estos vecinos en abrir ilegalmente.
La razón por la que esta playa históricamente nunca había tenido acceso, se debe a que hasta hace poco más de 40 años, el sector era parte de los fundos "Santa Amalia", "Santa Amalia del Lago", y “El Carmen de Colico", con 3 mil hectáreas, los que fueron expropiados por el Estado y entregados gratuitamente la Cooperativa “La Esperanza Limitada”, conformada por 32 socios, mediante un proyecto que había sido aprobado el 23 de julio de 1970 por la Ex Corporación de la Reforma Agraria, Cora.
En septiembre de 1978 se aprobó la división de los terrenos en 31 unidades agrícolas familiares, 38 sitios, un bien común especial y dos reservas, y una de estas últimas, la “Reserva Cooperativa 2”, fue autorizada a ser vendida inmediatamente después que el Estado levantara la prohibición de hacerlo, según consta en el acta de la asamblea de la Cooperativa de fecha 22 de noviembre de 1978, y para ello se entregó representación, en todas las gestiones de venta, a los socios Fernando Sepúlveda Aravena, Adriano Arellano Véjar y Víctor Landeros Alchahueñe, estos dos últimos, abuelos de los directivos de “Colico entrada libre”, Gustavo Arellano y los primos Landeros, que han sido los promotores de toda la violencia en nuestra contra.
Para nosotros y para entender LA VERDAD, es importante entender toda esta historia y el proceso completo, y también que la venta de la “Reserva Cooperativa 2”, se hizo sin gravámenes de ninguna especie, según consta en todos los documentos, y en todos los procesos llevados adelante en los tribunales, lo cual implica que también los caminos interiores del proyecto son todos privados, no públicos, y responsabilidad exclusiva de los propietarios, tal como lo ratificaron todas las instancias judiciales.
Nosotros como familia, que no le compramos directamente a la cooperativa, sino a quienes ellos vendieron, llegamos a La Esperanza hace casi 40 años, y por más de dos décadas, desarrollamos un vivero que vendía toda su producción en la capital, y que generó trabajo permanente a decenas de familias del sector.
En el año 2016, como propietarios, acordamos con el Intendente Francisco Huenchumilla el trazado para un acceso de uso público y expedito a la Playa ubicada en la ribera poniente del Lago Colico, tal como lo estipula la Ley, y para ello se firmó un acta de acuerdo.
Lamentablemente, meses después el Intendente Andrés Jouannet desconoció ese acuerdo, Y ARBITRARIAMENTE fijó un acceso diferente, de 11 metros, por la mitad de nuestra casa, lo cual obviamente nos obligó a llevar esta situación a los tribunales, donde no en una, sino EN TODAS LAS INSTANCIAS, se nos dio la razón, lo que quedó plasmado en TODOS LOS FALLOS Y RESOLUCIONES ADMINISTRATIVAS, por lo tanto, el acceso de uso público a este bien nacional es A 150 METROS DE DISTANCIA DE NUESTRA CASA y NO POR NUESTRA CASA.
Los hechos son gravísimos, y la falta de antecedentes objetivos en los relatos periodísticos, se hace cómplice del ambiente de violencia. Lamentamos, asimismo, la ausencia absoluta en este caso de las autoridades y de la institución encargada del Orden Público, para haber contenido los desmanes y los delitos cometidos, PESE A QUE CONTAMOS CON MEDIDAS DE PROTECCIÓN DICTADA POR TRIBUNALES.
Por último, informamos que a la querella criminal que presentamos en contra del alcalde, y los concejales, sumamos una denuncia en los tribunales civiles, que ordenaron al municipio detener la construcción ilegal del camino que habían comenzado a construir por nuestra casa.
Finalmente, rechazamos la campaña de desinformación y de fomento al odio de clases, que Gustavo Arellano y los primos Landeros, han impulsado para justificar la serie de hechos delictuales cometidos. Pese a la burla que estas personas han expresado en RRSS de las resoluciones judiciales y de la lentitud de los procesos, esperamos que FINALMENTE SE HAGA JUSTICIA.
Familia Ortúzar Phillips