25/12/2020
CARTAGENA,DICIEMBRE 24 DE 2020.
ECONOMIA DE COLOMBIA DESNUDA DE COOPERATIVISMO
En su análisis Perspectivas para el Cooperativismo 2019, Confecoop señala, que después de dos años de desaceleración económica (2016-2017), Colombia repuntó durante 2018 e igualmente preveía un crecimiento constante y favorable para 2019.Dichos pronósticos, al igual que los formulados por el DNP, no ocurrieron, sino por el contrario, nuestro PIB tuvo bajos niveles de crecimiento durante esos años, hasta colapsar con la crisis económica de 2020, causada por la pandemia del covid-19,con graves consecuencias de quiebras de empresas, desempleo generalizado y un bajonazo del - 10% del PIB aproximadamente, con un consecuente retroceso de nuestra economía a niveles de hace 22 años. Este torbellino produjo también graves consecuencias para el desprotegido sector cooperativo y de la economía solidaria en su conjunto, con cada vez menos peso en la estructura empresarial colombiana.
Por otro lado, a pesar que el mismo informe afirma la presencia de un crecimiento relativo, reflejado en las actividades más significativas del cooperativismo, tales como en los Fondos y Cooperativas de Ahorro y Crédito, que representan el 70.3 %, las operaciones agropecuarias y productivas con el 7.33% y las aseguradoras con un porcentaje del 4.16% de la totalidad del sector cooperativo colombiano, también golpeados fuertemente por la crisis vivida durante este año 2020,dejando al desnudo las grandes debilidades del sector solidario, con baja diversificación de sus actividades productivas o de servicios, sin crecimiento en sus múltiples formas de organización o tipos de cooperación. Esa situación se puede profundizar más debido a la ausencia de políticas públicas reales, hasta minimizar la utilidad de la economía solidaria, como potente instrumento de desarrollo social y económico en todos los ámbitos de la economía, orientación esta, que ha quedado patente o explicita en los gobiernos de los últimos 40 años, en la medida que dejaron en el olvido el apoyo del estado a este importante sector en los Planes Nacionales de Desarrollo y en los presupuestos de las dependencias gubernamentales con responsabilidades en la dinamización de las empresas solidarias. Esta situación es más patente con la debilidad institucional del estado colombiano en esta materia. Antes existió un Departamento Administrativo Nacional con recursos propios para apoyar el sector, hoy en día el estado dejo de contemplar el modelo del cooperativismo y de economía solidaria en su Plan Nacional de Desarrollo 2018-2022.”Pacto por Colombia, Pacto por la Equidad” ,como tampoco le ha dado ninguna importancia a este tipo de empresas, al reducir la actuación del gobierno a un sistema de vigilancia extrema de dos Superintendencias Nacionales y deja prendida la luz de una vela, que alumbra en la penumbra de un rincón del Ministerio de Trabajo, colocada en una pequeña oficina con un largo nombre UNIDAD ADMINISTRATIVA DE ECONOMIA SOLIDARIA.
De ninguna manera se podrá en este contexto, dinamizar el sector solidario de la economía nacional, que podría ser convertida en una importante herramienta para la recuperación económica en una diversidad de sectores productivos o de servicios, para erradicar el desempleo y la pobreza en los planes de reactivación económica post-pandemia.