Si estás pasando por un mal momento puede que dudes si viajar te puede ayudar a ser más feliz o simplemente pienses que es un gasto innecesario. Pues bien, según estudios de científicos experimentados tienes que saber que viajar…
Viajar nos regala esa ilusión de conocer lugares exóticos, sabores del mundo, culturas desconocidas… Viajar es una aventura en todos los sentidos que siempre te reporta algún nuevo conocimiento. Es esa emoción, tras descubrir estas curiosidades, la que va ligada a los recuerdos de nuestros viajes.
Viajar te aleja de tu rutina diaria, del estrés del día a día, hace que tu cerebro se relaje por unos días y disfrute de nuevas emociones, diferentes a las que está acostumbrado. Puedes hacer otras cosas en tu ciudad para despejarte, como ir de compras o hacer algunos planes con tus amigos, pero al final acaban convirtiéndose en algo normal y no te dan tanta felicidad como viajar.
Hace que confíes más en ti
En muchos viajes nos encontramos con obstáculos o imprevistos que no esperaríamos encontrar en nuestra vida diaria. Fuera de nuestra zona de confort en mucho más fácil luchar contra ellos y al volver a casa nos sentimos mucho más fuertes y con más confianza en nosotros mismos. Además hace que seas más flexible, una experiencia en el extranjero nos obliga en muchos casos a adaptarnos a cambio de planes y esto al final nos hace ser más tolerantes y flexibles.
Te da las mejores anécdotas
Y después de un viaje increíble nos encanta contar las anécdotas más sorprendentes que hemos vivido y las fotos de los lugares que hemos visitado, esto nos hace sentir mucho mejor con nosotros mismos que enseñar los muebles o la ropa nueva que nos hemos comprado a nuestros amigos.
Abre las puertas a tu imaginación
La felicidad que te da un viaje empieza desde el momento en que lo estás planeando, abriendo paso a tu imaginación y la ilusión de cómo de genial será, y además, sigue después de haberlo hecho, recordando todos los buenos momentos y anécdotas.
Nos hace valorar más lo que tenemos
Cuando viajamos descubrimos cosas increíbles y también nos damos cuenta de lo felices que son algunas personas sin tener tantos bienes materiales como nosotros. Hasta que no nos alejamos de todas nuestras comodidades no valoramos todo lo que tenemos.
Viajar te enseña que hay mucho más que lo que estás acostumbrado a ver en tu día a día. Es cierto que la vida no es tan larga para conocer los millones de lugares que tenemos para descubrir, pero sí que tienes toda una vida para ver muchos de ellos.
Está demostrado científicamente que a largo plazo serás mucho más feliz si inviertes tu dinero en viajar que si lo gastas en ropa de marca o en un coche de lujo. Así que la próxima vez que a alguien se le ocurra decirte ¿Por qué no ahorras dinero en vez de gastarlo en viajar a Indonesia? Ya le puedes decir que viajar no significa malgastar dinero, es invertirlo en felicidad.
Este año no te quedes en casa. Aprovecha tu tiempo y dinero para ser más feliz ¡viajando!