19/04/2017
Y por fin, tras tres duros días de desmontaje, Río Selmo queda desierto. Y desiertas también sentimos nuestras vidas después de haberle dado su último adiós a este pequeño evento. Y decimos último, sí, Clara y Amelia ya lo comunicaron personalmente en los últimos minutos de la despedida, pero es hora de hacerlo público. Es hora de despedir Freakzone, despedirlo tal y cómo lo conocéis, seáis de los veteranos o de los que nos habéis conocido este año, despedir el centro cultural, despedir el evento y todos los buenos momentos que habéis pasado con nosotros. Muchos de vosotros nos habéis permitido ver cómo creciáis de la mano de cuatro años de evento, habéis hecho grandes amigos aquí, habéis comprado muchos recuerdos y regalos en los stands o echado partidas memorables con vuestros amigos y disfrutado con las actividades que llenaban de vida la ciudad durante esos días. Hemos cuidado con mucho cariño este evento, y sabemos que muchos de vosotros también lo hacíais, convirtiéndolo en vuestra casa durante las vacaciones, porque era así como nos sentíamos. Freakzone era un lugar donde nadie te juzgaba, donde podías ser tu mismo y disfrutar con la gente, que en muchas ocasiones, tras Freakzone, acababan siendo tus amigos. Todos hicimos grandes amigos en Freakzone, y vivimos momentos que siempre llevaremos en nuestros corazones. Son infinidad de cosas recogidas durante cuatro días a lo largo de cuatro años consecutivos. Pero como pasa con todo lo bueno, tarde o temprano, llega a su fin.
Por desgracia, es hora de dar el adiós a Freakzone. Aparcamos aquí un proyecto que comenzamos con la mayor de las ilusiones, allá por 2014, que ni remótamente nos imaginábamos que lograse alcanzar las barreras de público que hemos logrado ni haber podido disfrutar de las oportunidades posteriores que esto nos brindó. Son tantas las cosas buenas que podríamos decir que nos ha traído Freakzone que esta nota sería infinitamente corta para definirlas. Pero también han sido muchos los problemas que ha conllevado realizar el evento, año a año, y las dificultades han arraigado profundamente a nuestro alrededor. Y no hablamos tan sólo de dificultades económicas, sino también personales, y por desgracia muchas fruto de malas experiencias con público que no ha sabido apreciar el cariño que hemos puesto en este evento.
Realizar un evento gratuito que ha logrado atraer a la ciudad 8000 visitas en cuatro días no es fácil, y luchar por el presupuesto que supone llevarlo a cabo en los tiempos que corren es muy complicado cuando no se cuenta con ayudas de entidades públicas y supone, en la mayoría de los casos, una considerable lista de pérdidas. Hasta día de hoy esto no había intercedido en nuestras ganas de llevar adelante una vez más Freakzone pero este año ha sido, con diferencia, el más duro de los cuatro.
No con ello queremos decir que desaparezcamos. Seguiremos dando guerra con Team Rocket Asociación y por sus redes tendréis noticias pronto y sin ir más lejos de un proyecto por el que llevan apostando meses de dedicación y que muy pronto se desvelará. ¡Os espera además un verano cargado de actividades y proyectos que estamos seguros de que os gustarán! Y nunca, jamás, perdáis esa sonrisa que Freakzone os supo transmitir, pues esa ilusión y alegría es el motor de proyectos como este. ¡Gracias por 4 años de eterna felicidad y satisfacción! Y recordad... Esto no es un adiós, tan sólo un hasta pronto ;)