16/12/2024
El 21 de julio 1570 los pioneros de la comarca del Mezquital de Apaseo, aprovecharon hacer realidad un sueño de vivir en una villa protegida, por en sus ranchos estaban en peligro y amenaza de muerte por los indios Chichimecas que duraron 50 años en la pelea por sus territorios, salió el virrey de la ciudad México a combatir a los indios acompañado de un fuerte acompañamiento de soldados la primera semana del mes de julio con rumbo a las minas de Guanajuto, y a su paso por el vado del rio (san Miguel ) Rio de la laja, lo esperaban estancieros y labradores del Mezquital de Apaseo para solicitarle permiso de fundar una villa de españoles, el curto virrey de la nueva España Martín Enrriquez de Almanza, atendió los atendió, a acepto la propuesta de fundar la nueva villa en el predio ganadero LA ESTANCIA DEL RIO propiedad de Don Gaspar De Salvago, a quien el virrey a nombre de la corona Española compro en seiscientos pesos oro.
Nombró a su consul Dr. Francisco de Sandy, para que junto con el gobernador de Guanajuato se hiciera la traza oficia , en el terreno ubicado estratégicamente en el " " " " " Cruze oriente poniente y de sur a norte "
Esté fue la motivación de escoger este terreno la estancia del Río hoy Celaya.
El 12 de octubre el virrey concedió el permiso, que llegó de manos del Dr de Sandy el el 19 de Octubre, reunidos los interesados en el portal de Requena o postal Colunga , el Dr. De Sandy les comunico que los solares tierras y aguas tenían que pagar a la corona Española veinte mil pesos oro que deberían de cubrir en dos partidas.algunos pensaban que se las Iván a regalar y se retiraron. Para la fundación el decreto virreinal las órdenes era que deberían de ser 30 hombres casados que se deberian que juntar para hacer cabildo, después de haber oído misa del espíritu Santo, así como el Domingo uno de enero de 1571 se reunieron bajo un mezquite en el lugar que la traza señaló para la casa del cabildo frente a la plaza como ordena la traza,
Fomentar con sentido socio-económico el turismo popular. y valorar como sociedad mexicana las bellezas de nuestro país disfrutarla es un privilegio divino.
