17/04/2021
TIPS PARA ELEGIR EL DESTINO DE TU PRÒXIMO VIAJE.
*¿Por qué quieres viajar?
Antes de entrar en cómo elegir destino de viaje, debemos preguntarnos por qué viajamos. No es lo mismo llevar a cabo una experiencia de este tipo porque queremos descansar de nuestras ocupaciones que porque deseamos explorar una cultura diferente.
Las motivaciones que llevan a cada persona a viajar son múltiples y variadas. Y del mismo modo, la experiencia de cada una en sus viajes también difiere de la que han tenido o tendrán los demás. Por este motivo, tenemos que preguntarnos en primer lugar qué es lo que deseamos nosotros. De nada nos servirá viajar a destinos populares como Vietnam o Tailandia si nos aterra la idea de pasar horas en un avión.
Por otra parte, nuestro estado de ánimo también va a influir al elegir destino de viaje. Y también, cómo no, nuestra condición física. La idea general es decantarnos por una opción que se adapte a nuestras circunstancias personales del momento. Si tenemos estos aspectos claros, ya podemos pasar a nuestros consejos para tomar la decisión.
*Trucos para elegir destino de viaje
Identifica la finalidad de tu viaje
Como ya te anunciábamos, es importante saber qué esperamos de nuestras vacaciones antes de elegir destino de viaje. ¿Qué es lo que nos apetece? ¿Deseas descansar en una playa desierta y olvidarte de todas tus preocupaciones? O por lo contrario buscas experiencias salvajes a la hora de elegir destino de viaje. Las posibilidades son infinitas; identifica qué deseas vivir y adapta tu viaje a ello.
¿De cuánto tiempo dispones?
La duración de nuestras vacaciones es otro punto clave al elegir destino de viaje. Si debemos tomar un avión durante muchas horas para llegar hasta él, tendremos que descontar dos días de la disponibilidad total que tenemos; uno para la ida y otro para el regreso. Además de la dureza del viaje en sí, necesitaremos un tiempo para adaptarnos a la diferencia horaria.
Por otra parte, dado que se trata de lugares a los que lleva más tiempo llegar, es preferible optar por ellos si tenemos al menos dos semanas para conocerlos. Si nuestras vacaciones son de siete días, quizás sea mejor quedarnos en Europa. Y si por el contrario no tenemos fecha de regreso, podemos realizar viajes extra largos e incluso dejar abierto la fecha de regreso.
¿Cuál es tu presupuesto?
La distancia no equivale a un precio más elevado, ya que siempre es posible encontrar ofertas a cualquier destino. Sin embargo, sí que es conveniente establecer una cifra que queramos invertir. Hay que tener en cuenta que no solo habrá que pagar el boleto de avión. También debemos pensar en el alojamiento, la comida y el propio nivel de vida en el lugar de destino.
Algunos lugares remotos implican un precio de vuelo más elevado. Por el contrario, su moneda vale muy poco en comparación con la nuestra. Esto significa que lo que gastamos en los pasajes lo podremos compensar con los gastos del día a día durante las vacaciones.
¿Qué modalidad de viaje buscas?
Continuando con la línea del punto anterior, otro punto importante al elegir destino de viaje es el tipo de viaje en sí. Si somos personas aventureras, podemos dejarnos llevar por la experiencia y comer en puestos callejeros y otros establecimientos de bajo presupuesto. Asimismo, a la hora de alojarnos, podemos compartir habitación con otras personas viajeras, y para los desplazamientos, ir a pie o alquilar una bicicleta si el terreno lo permite.
Si lo nuestro es viajar con comodidad y no tener que improvisar nada, habrá que pagar por ello. Excursiones guiadas, taxis o cenas en restaurantes elevarán considerablemente el presupuesto, pero también nos darán un mayor descanso. Asegúrate de que tu destino te proporciona lo que estás buscando.
Esperamos que con estos consejos para elegir destino tengas más claro lo que deseas experimentar en tu viaje. Pero recuerda que la última palabra la tienes tú.