04/02/2025
| ONCOCREAN
🖋️ de Zoé Robledo, Director General del Instituto Mexicano del .
Iker de Puebla, Dalan de Morelos y Ángel de Tabasco son tres niños que tienen cuatro cosas en común: enfermaron de cáncer, son parte de la Familia IMSS, se atendieron en uno de los 36 OncoCREAN y han tocado la Campana de la Victoria: vencieron a la enfermedad. Según datos del Inegi, el cáncer infantil representa la primera causa de muerte por enfermedad en niños de 5 a 14 años en México.
Sin embargo, durante años, en el Seguro Social la atención especializada para niñas, niños y adolescentes con cáncer solo estaba disponible en tres ciudades: Monterrey, Guadalajara y Ciudad de México. En 2016 abrió un Centro de Referencia en Tapachula, Chiapas; en 2017, uno más en La Paz, Baja California Sur, y en 2018 se avanzó en Coatzacoalcos, Veracruz, y en Tepic, Nayarit.
Esto obligaba a la mayoría de los pacientes de otros estados a realizar largos traslados, lo que no solo generaba desgaste físico y emocional, sino que reducía sus expectativas de vida y también implicaba altos costos para las familias, dificultando la continuidad del tratamiento.
En el mejor de los casos, aquellos pacientes que no recibían atención en ciudades con Centros de Referencia eran atendidos por oncólogos de adultos, sin protocolos estandarizados. Por eso, a mi llegada al IMSS planteamos construir un Centro de Referencia Estatal para la Atención de la Niña y el Niño con Cáncer (OncoCREAN) en cada estado. Hoy contamos con 36.
Este modelo ha mejorado la accesibilidad y proximidad de la atención, permite que 85% de los pacientes tenga su diagnóstico en menos de 7 días y comience su tratamiento en los primeros 3 días posteriores. Además, no se limita a tratamientos como quimioterapia, cirugía y radioterapia, sino que también aborda aspectos psicológicos, sociales y económicos que enfrentan los pacientes y sus familias.
A la par de este proceso, en la 4T se reformó la Ley del IMSS para otorgar Licencias Laborales a Padres y Madres de Niños con Cáncer, que les permite acompañar el tratamiento de sus hijos sin riesgo de perder el empleo, lo que significaría la pérdida de la derechohabiencia ante el IMSS y la cancelación del tratamiento con lo que ello representa: volver a comenzar estudios, atenderse bajo otro esquema médico, con otros medicamentos, con otros protocolos.
Desde 2019 se han entregado 27,122 licencias y 2,324 personas han sido beneficiadas, la mayoría de ellas mujeres. Asimismo, desde 2020 creamos el Grupo de Trabajo para la Atención de Pacientes Pediátricos bajo Tratamiento Oncológico. Ahí damos seguimiento a temas específicos: llevamos 161 sesiones, 738 acuerdos resueltos, 3,992 casos atendidos.
También pasamos de dar seguimiento con un carnet en papel sin formatos estandarizados a contar con un expediente clínico electrónico al que se puede acceder desde cualquier dispositivo electrónico.
Otros datos: de 2019 a la fecha, contratamos a 256 médicos especialistas pediatras, hematólogos y oncólogos pediatras para los OncoCREAN, crecimos en 257 camas de hospitalización para pediatría oncológica, pudimos diagnosticar en etapa temprana 4,078 casos y capacitamos a más personal en la atención especializada de cáncer infantil.
Y lo mejor: todo esto permitió pasar de la sobrevida de 34% registrada en 2018 a cerrar 2024 con más de 90%, rango que solo algunos países de Europa alcanzaban.
En otro tema que nos importa, ahora el IMSS hace implantes mamarios para mujeres que hayan enfrentado una mastectomía derivada del cáncer de mama; antes estaba imposibilitado, pues se consideraba una cirugía estética. Logramos revertir esa posición. En el marco del Día Mundial contra el Cáncer vale la pena hablar de esto.
Mientras escribo: ¡tenemos mucha Presidenta!