21/02/2024
Este perrito entró a la iglesia y se acostó en Jesús, le avisaron al sacerdote y vino a ver y les dijo: “Déjenlo… no lo molesten”
La sorprendente razón detrás de por qué el sacerdote católico permitió que el pequeño perro descansara sobre la imagen de Jesús nos ha dejado a todos conmocionados y reflexionando sobre la profunda conexión que existe entre los seres vivos y la espiritualidad.
El padre compartió en su perfil de Facebook una serie de fotografías que han capturado la atención de personas en todo el mundo.
Este conmovedor episodio tuvo lugar en la Iglesia Matriz de Aguas en Santa Bárbara, cuando el sacerdote se encontraba realizando los preparativos habituales para la misa.
Mientras arreglaba el altar, se percató de algo inusual debajo de él: un perro callejero que descansaba plácidamente sobre la representación de Jesucristo.
La perrita decidió permanecer allí durante toda la ceremonia, durmiendo tranquilamente. El padre Zanin afirmó que parecía encontrar una sensación de protección y seguridad cerca de la figura de Jesús.
Resultaba sorprendente observar la confianza y serenidad con la que el animal dormía, incluso en medio del constante ir y venir de personas. En ese momento, el sacerdote reflexionó sobre cómo nosotros también podríamos entregarnos a Jesús con la certeza de que siempre estaríamos resguardados y protegidos en su presencia.
Las enseñanzas que los animales nos brindan son verdaderamente asombrosas. Incluso me emocioné hasta las lágrimas durante la consagración cuando me acerqué y la vi allí, debajo del altar.
En lo profundo de sus ojos, pude vislumbrar la presencia de Nuestro Señor. Esto nos invita a reflexionar sobre la importancia de la presencia divina en nuestras vidas, expresó el padre Zanin.
La perrita era una vagabunda a la que el monseñor solía ofrecer agua y alimento cada vez que se acercaba a la iglesia. Después de este acontecimiento tan especial, muchos miembros de la comunidad han manifestado su interés en adoptar a la perrita debido a la forma inusual en que fue encontrada.
La historia de esta can callejera resulta aún más sorprendente. Había desaparecido hace algunos días y no se había vuelto a ver por la iglesia en busca de comida. Sin embargo, de manera inexplicable, apareció en la puerta de la iglesia. Su desaparición y posterior aparición en ese lugar tan significativo, en los brazos de Jesús, ha conmovido profundamente a todos los presentes.
Este encuentro emotivo entre el sacerdote y la perrita ha dejado una huella profunda en la comunidad. Nos recuerda que existe una conexión que trasciende las barreras entre los seres vivos y que, a veces, los mensajes más poderosos se encuentran en los momentos más inesperados.
Este acto de amor y protección compartido entre el animal y la imagen de Jesús nos invita a reflexionar sobre el papel que desempeña la fe en nuestras vidas y cómo podemos encontrar consuelo en los lugares menos esperados.
La historia de esta perrita callejera y el sacerdote ha despertado la compasión y el interés de muchos. Esperamos sinceramente que encuentre un hogar lleno de amor y cuidado, donde pueda experimentar la misma protección y seguridad que sintió cerca de Jesús en aquel altar sagrado.