27/03/2017
Una diferencia significativa entre Vuelo Comercial y Privado
La clave para seleccionar entre un vuelo comercial y uno privado es entender la diferencia entre los dos tipos y ver sus ventajas y desventajas. Para el caso viene bien recordar una antigua frase: “El tiempo vale Oro”. Podría afirmarse que para muchos hombres y mujeres de negocios, ésta es una regla básica en sus filosofías de vida. Por ello muchos viajeros deciden tomar un vuelo privado que pueden programar de acuerdo a sus necesidades.
Los vuelos regulares, operados por las principales compañías aéreas, tienen flotas enormes y horarios ya establecidos, lo que significa que usted supeditar su horario al de ellos, además de compartir la cabina del avión con muchos otros pasajeros y muchas veces, no tener el asiento que deseaba.
Un vuelo privado le brinda la posibilidad de programar su viaje de una forma más personalizada y efectiva, mucha más acorde con su agitada vida de negocios y de placer, y le permiten, a diferencia de los vuelos regulares, eligir con quien compartir el viaje.
La mayor diferencia está dada en que, en un vuelo privado, usted no tendrá que presentarse a su vuelo con dos horas de antelación. Tampoco corre el riesgo de retrasos, pérdidas de equipaje, largas filas en controles extensos de seguridad, ni de estar sujeto a muchas normas restrictivas o a la mala actitud, en muchas ocasiones, del personal que trabaja en los aeropuertos. En cambio, se abre un abanico de posibilidades para que su viaje se transforme en una experiencia única y con mucho estilo.
El costo de volar privado es un punto que muchas veces nos hace elegir erróneamente. Los beneficios de la aviación privada se deben medir por el costo de viajar en primera clase en un vuelo comercial. Para toda persona de negocios el tiempo es dinero; entonces, si lo vemos desde ese punto de vista, cuando elegimos tomar un vuelo comercial perdemos más tiempo y por ende más dinero que si hubiéramos planificado un viaje privado de acuerdo a los requerimientos de nuestros negocios y deseos. Y al final del día, las tarifas de un vuelo privado resultan bastante competitivas, comparadas con lo que puede llegar a costar un vuelo en primera clase o en clase ejecutiva. En definitiva, en la mayoría de los casos, usted está pagando una cantidad similar a los viajes comerciales al tomar un viaje en un avión privado, con el plus de realizar su viaje de negocios combinados con el lujo y placer de llegar a su destino sin estrés.
Por todas estas razones, piénselo muy bien la próxima vez que programe un viaje. Muy seguramente le resulte mucho más económico, menos estresante, y sin duda, mucho más sofisticado llamarnos y embarcarse en el placer de volar privado. ¡Bon voyage!