15/06/2023
La glorieta o Templo de la música de Managua.
La nueva glorieta o Templo de la música, como se le llamó seguía la tradición decimonónica que se había cultivado en algunos municipios (Granada y León), donde se había reservado la glorieta para reunir a la población a escuchar música ejecutada por las bandas musicales locales
El Templo de la música aparecería por encima del nivel del suelo y se podría acceder al mismo por unas tres o cuatro gradas, en la parte externa le rodeaban fuentes de agua cuya agua brotaba de unas cabezas de dragones y corrían en cascada de tres niveles. Estaba sostenido por columnas lisas y en la parte superior de techo abovedado.
Fue una obra encargada a los arquitectos y escultores a su vez, Víctor Sabater, y el nicaragüense Ernesto Brown, Construido con concreto armado y hierro, de igual manera con piedra volcánica, su diseño evidentemente circular, en el marco del diseño arquitectónico acústicos, para las presentaciones musicales de la Banda de los Supremos Poderes de la Guardia Nacional, esta obra fue realizada durante la administración de Anastasio Somoza García (Tacho Viejo), inaugurada el 22 de Octubre de 1939. El Templo de la Música se caracteriza por sus frisos de esculturas de relieve a su alrededor, compositivamente narra los acontecimientos históricos, relevantes de Nicaragua, es decir, que podría ser leído con la imagen, propio del estilo neoclásico, en la antigua Roma, era de hecho, el discurso de los vencedores frente a los vencidos, mediante el uso secuencial de la imagen de relieve, a lo que le llamamos cronología visual.
Las perspectivas antagónicas de interpretar las escenas de la columna se basan en la forma en que los relieves fueron vistos y leídos por los espectadores. Una visión de la historia lineal. Primeramente se aprecia la cultura prehispánica como base de nuestra identidad, el arribo de los conquistadores representador por Cristóbal Colón a nuestras tierras americanas, y por consiguiente la resistencia indígena, seguido de la colonización española, en el siguiente fragmento: La Evangelización de los ibéricos a los indígenas nicaragüenses, una figura sobresaliente es la de Fray Bartolomé de Las Casas: La narrativa sigue con la resistencia de Rafaela Herrera y su heroica actuación frente a los piratas ingleses; la firma del Acta de la Independencia del Centroamérica del 15 de Septiembre de 1821; los hechos heroicos de la Batalla de San Jacinto, destacando a Andrés Castro, los actos de invasivos por William Walker y sus tropas en Nicaragua, después la modernidad del siglo XX el uso mecanizado de la agricultura y la ganadería, es decir, la tecnología como símbolo de progreso y desarrollo económico.