15/01/2025
¿EXISTEN TUNELES SUBTERRANEOS DEBAJO DE LA CIUDAD DEL CUSCO? En 1922 el intelectual y educador cusqueño Jose Uriel García recogió una tradición muy conocida en el Cusco.
“Cuentase que un individuo tuvo la audacia de penetrar a la llamada Chincana grande -chincana, lugar donde se pierde- i al cabo de más de una semana, una mañana, cuando el altar de la capilla del Rosario, en el templo de Santo Domingo [antiguo Ccoricancha], al tiempo de que un fraile celebraba la misa, se oyeron recios golpes que venían del subsuelo, en medio de la alarma de los asistentes. Descubrieron la loza, salió un hombre completamente extenuado, trayendo en las manos una mazorca de oro macizo. Era el hombre que días antes penetró a la Chincana”. (García, 1922, p. 28)
El termino Chicana en la lengua quechua más que referirse a los túneles, se refiere al acto de esconderse o extraviarse. Según el diccionario de González Holguín de 1608 “Chincana Pacacuna” se interpreta como “escondrijo”.
El inca Garcilaso de la Vega en sus Comentarios Reales de los Incas menciona la existencia de las calles subterráneas o “soterraños” que vio en su infancia y los relatos sobre personas que habían entrado a los túneles y se habían extraviado en ellos. Garcilaso dice que “estaban labrados con tantas calles y callejas, que cruzaban de una parte a otra con vueltas y revueltas, y tantas puertas, unas en contra de otras y todas de un tamaño que, a poco trecho que entraban en el laberinto, perdían el tino y no acertaban a salir; y aun los muy prácticos no osaban entrar sin guía; la cual había de ser un ovillo de hilo grueso que al entrar dejaban atado a la puerta, para salir guiándose por él”. (Garcilaso de la Vega, 1609, cap. XXIX).
Esta comparación que hace el Inca Garcilaso de los laberintos del Cusco, con el laberinto del Minotauro de Creta, es un ejemplo de la influencia de la cultura grecolatina en sus narraciones.
El cronista indígena Felipe Guamán Poma de Ayala también conoció de la existencia de estos túneles subterráneos a los que llamó Chingana: “Cómo tenía grandes fortalesas llamado Sacsa Guaman y Puca Marca, Suchona, Callis Pucyo, Chingana el agujero de debajo de la tierra le llega hasta Santo Domingo, Curi Cancha del Cuzco”. (Guamán Poma, 1615, f. 337)
En estos días, una noticia se refiere a la existencia de túneles o galerías subterráneas que unen lugares sagrados de los incas en la ciudad del Cusco. Ya en 1997 se inició la investigación de estas galerías subterráneas. En el año 2003 el investigador español Anselm Pi Rambla afirmó haber encontrado evidencias de un túnel subterráneo de casi 2 kilómetros que unía el templo del sol (Koricancha) con Sacsahuamán. En su trayecto conectaba también con el convento de Santa Catalina, la catedral del Cusco, el palacio de Huáscar, Colcampata y Huamanmarca. Pi Rambla creía que estos edificios estaban alineados astronómicamente.
A finales del 2024 el arqueólogo Jorge Calero Flores y la arqueóloga Mildred Fernández Palomino del Proyecto Chincana, utilizando radares subterráneos confirmaron la existencia de estos conductos debajo de la ciudad, que están ubicados entre 1,5 y 2 metros de profundidad.
Queda todavía investigar y determinar para que fueron utilizados estos túneles y si tienen relación con los ceques o antiguas líneas invisibles que unían los lugares sagrados de la ciudad del Cusco, muy estudiados por el antropólogo holandés Tom Zuidema.
Sobre los túneles también se ha referido la historiadora norteamericana Jeanette Sherbondy, relacionando los túneles con el culto al agua. Esto es apenas el comienzo de una investigación que plantea más preguntas que respuestas. Como anota Sherbondy: “Es difícil disociar el mito de la realidad en el tema de los pasajes subterráneos”. (Juan José Pacheco Ibarra).
REFERENCIAS
García, José Uriel (1922). La ciudad de los incas. Estudios arqueológicos. Cusco: H. G. Rozas.
Garcilaso de la Vega, Inca. (1609). Comentarios reales de los incas. Lisboa: Oficina de Pedro Crackbeck.
González Holguín, Diego (1608). Vocabulario de la lengua general de todo el Perv… Ciudad de los Reyes: Francisco del Canto.
Guamán Poma de Ayala, Felipe (c. 1615). Nueva Coronica y buen gobierno. Web de Guamán Poma de Ayala.
Sherbondy, Jeanette (2017). Agua, riego y arboles: ancestros y poder en el Cusco de los Incas. Lima: Sociedad Geográfica de Lima.
Creditos : Rincón de historia Peruana