Un Club de amigos que ha sabido mantener como bandera sus principios. Somos un Club centenario, con una historia y una razón de ser que hoy en día todavía perdura. Un Club gentil, cortés y símbolo de hospitalidad, tal como lo eran las gentes que lo fundaron. Las obras de beneficencia han sido punto de referencia de nuestra existencia, y con este motivo se reconoció al Club en el año 1959, con el g
alardón del Círculo Villalta de Madrid por el que ingresa en la Orden Civil de Beneficencia. La primera obra benéfica que realizó fue en 1912, poco tiempo después de la fundación, cuando una galerna se llevó la vida de 116 pescadores. El Club Cocherito, y desde luego, toda la ciudad apoyando, nos volcamos para ayudar a las familias afectadas. Seguimos, durante toda nuestra historia, realizando ayudas a viudas de toreros o subalternos mu***os, o siempre que un temporal azotaba nuestras costas con resultado trágico. Nuestro interés por la acción cultural convive con la acción de hacer el bien. Auténticos motivos que escriben nuestra historia, y que es el cordón umbilical que une a los aficionados al toreo, en nuestro Club. La labor benéfica se extiende al Santo Hospital Civil de Basurto, La Casa de la Misericordia y los asilos. Instituciones muy queridas por todos los bilbaínos. Son muchos los actos festivos que el Club Cocherito ha organizado a favor de la sociedad. Pero no hay que olvidar, que lo que une a los socios del Club, es nuestra afición a los toros, y en este sentido, hemos organizado multitud de capeas, novilladas, corridas, ...
Desde el año 1962, otorgamos el premio al toro más bravo de la feria de Agosto. Igualmente, mantenemos con los ganaderos un acercamiento que concretamos en varios encuentros anuales visitando sus fincas. Además, mantenemos periódicos coloquios en nuestra sede con representantes de todos las campos del mundo taurino: toreros, empresarios, médicos, ganaderos, apoderados, periodistas, fotógrafos, ...
En Semana Grande, en las fiestas de Bilbao, son numerosos los aficionados que comparten mesa en nuestros coloquios, junto a ganaderos y toreros, en animada charla, con respeto, seriedad, sabor y torería.