25/05/2024
¡Felicidades a Axel Chipana por su nominación en el Premio Miradas, 100 Emprendedores Exitosos! 🍕✨
//////////////////////////////////////////////////////////
Axel Chipana se destaca como un protagonista cuya travesía se desenvuelve con vividez y sazón. Su odisea gastronómica comenzó a los once años, cuando la esencia de la pizza, traída por su padre, desencadenó una sinfonía de admiración y el deseo de emular al patriarca.
Impulsados por la necesidad y la espera de un nuevo miembro en la familia, sus padres forjaron su propio destino. Así nació "La casita de las Pizzas" en Villa El Salvador, un oasis culinario que, a pesar de la incertidumbre, se convirtió en un hogar donde el aroma de las pizzas se mezclaba con la cálida acogida de la comunidad.
Con el paso del tiempo, "La casita de las Pizzas" evolucionó a "La Buena Pizza", una estrategia coordinada con la familia para incursionar en el mundo gastronómico. A los quince años, Axel, con una chaqueta que le quedaba grande, se convirtió en el engranaje de un equipo que fusionaba pasión y calidad, alcanzando reconocimiento en periódicos y siendo protagonistas de una película.
A los 18 años, Axel emprendió la carrera de Gastronomía, enfrentando obstáculos y aprendiendo de cada experiencia. Decidió aventurarse en Europa, donde, después de tres meses de búsqueda y oración, encontró una oportunidad en la pizzería "Bellillo". Su participación en la "Pizza Fest" y la conexión con maestros italianos marcaron un hito en su travesía.
En "Sartoria Panatieri", Axel se catapultó a la élite de la pizza europea, donde cada desafío era un trampolín hacia nuevas alturas. El rango de pizzero, su anhelo adolescente, finalmente se materializó.
Desde el epicentro de la mejor pizzería del mundo, Axel Chipana comparte su relato como una sinfonía de sabores y aprendizajes. Su sueño trasciende fronteras, anhelando llevar "La Buena Pizza" a Europa y compartir el Perú en un plato diferente.
A los electores y jóvenes soñadores, Axel lanza un mensaje impregnado de optimismo: la vida, plena de oportunidades, aguarda a quienes se aventuran a buscarlas. En la juventud, un lienzo en blanco, se encuentra el poder de mejorar cada día, rodeándose de buenas personas y amando a la familia. Desde la cúspide de la gastronomía, Axel nos insta a abrazar la vida con valentía, porque, como él demuestra, nada es imposible.